Escriba un correo a la revista Clan explicando su opinión sobre los programas que ven sus hijos

Estimado Redactor de la revista Clan,Mi nombre es Melilot Bunce, soy madre de tres hijos con edades de 4, 6 y 9 años. Mi marido y yo siempre hemos confiado en el grupo Clan como una apuesta segura para el entretenimiento de nuestros hijos, pues consideramos que representa los valores que queremos transmitirles. Como parte de esta educación a través del ocio cada mes les compramos la Revista Clan. Y hasta este día creíamos que estábamos haciéndolo bien al confiar en ustedes. Pero el día de hoy, nuestra perspectiva sobre Clan ha dado un giro de 180 grados al decidir ojear su revista, concretamente la edición de Agosto. Lo que hemos encontrado es una vergüenza: la mayoría de las secciones de la revista ocultan, tras un velo de inocencia y color, la perpetuación de estereotipos nocivos como el sexismo, o el deseo del mal ajeno.Comenzando por la peor página de todas, la sección “Travesuras de diablillos” es una clara representación de los estereotipos de género y patriarcales que precisamente pretendemos no educar a nuestros hijos en ellos. ¿Me puede explicar por qué mi hija de 6 años no puede jugar al fútbol? ¿O por qué mis hijos de 4 y 9 no pueden hacer ballet? Y no crea que se trata de una interpretación de las viñetas, sino que en su propia sección encontramos una caja con las “soluciones” a una pregunta tremendamente discriminatoria. ¿Por qué Tom tiene la habitación de color primordialmente azul/verde mientras que Nina la tiene principalmente rosa? ¿Acaso la niña no puede querer dedicarse a la ciencia y la exploración espacial en lugar de simplemente tener que seguir a un ídolo juvenil? Pero esta repugnante situación se expande al resto de la revista. Tom y Jerry, más cercanos a la parodia “Rasca y Pica” de lo que debería. Es indignante ver a Jerry riéndose de esa manera mientras Tom está sufriendo tanto. ¿Acaso han de aprender mis hijos que cuando se caiga uno de sus compañeros tienen que reírse en vez de ayudarle? ¿Es esta visión egoísta del mundo la que queremos transmitir a las futuras generaciones? Bob Esponja es otro dibujo que no salta nuestra lista. Lo único que verdaderamente aprenden nuestros hijos de estos dibujos, es que deben ser egoístas. Sus malos valores morales inundan sus cabezas de comportamientos que no deberían tener.Un cordial saludo, Melliot Bunce